Listado mensual: marzo, 2018
¿Estamos cubiertos ante las travesuras de los más pequeños de la casa?
¿Cuáles son los países más seguros del mundo?
Para muchos, la llegada de la Semana Santa es tiempo de hacer las maletas. A pesar del innegable atractivo que tiene España, cada vez somos más los que dejamos de lado el turismo nacional y nos lanzamos a recorrer otros países, cada vez más exóticos, pero no siempre seguros para el viajero.
El Global Peace Index 2017, elaborado por el Institute for Economics and Peace, lleva estableciendo desde el año 2008 una clasificación con los países con mayor seguridad, en función de factores como la existencia de conflictos violentos internos o externos o el impacto del terrorismo, entre otros.
El estudio concluye que los índices globales de violencia han mejorado durante el último año. Uno de los países que mejoran es Portugal, situado en tercer lugar, solo por detrás de Nueva Zelanda e Islandia, país líder en seguridad desde 2008.
En el extremo opuesto, no hay sorpresas y Siria es considerado el país más peligroso del mundo, acompañado por Afganistán e Irak.
Por su parte, España se sitúa en el puesto 23, mejor situada que Francia (51), Italia (38) o Reino Unido (41). Sin embargo, algunos de los países más visitados por turistas españoles tienen unos índices de peligrosidad elevados, como Estados Unidos (114), Marruecos (75), Turquía (146), o China (116), que no salen muy bien parados en este ranking. Por ello, en la web del Ministerio de Exteriores podemos encontrar algunas recomendaciones y advertencias para cada país; como lugares peligrosos que no se deben frecuentar, carreteras o infraestructuras especialmente conflictivas, riesgo de contraer enfermedades, etc. Entre los consejos generales se encuentran inscribirse en la embajada o consulado local y hacer fotocopias de nuestros documentos.
En cualquier caso, a la hora de viajar al extranjero siempre es altamente aconsejable contar con un Seguro de Viaje. Este servicio facilitará gestiones como disponer de asistencia sanitaria 24 horas, servicio de repatriación o la resolución de los trámites por pérdida del equipaje con un pago por indemnización incluido. Para elegir el seguro que mejor se adapta a sus necesidades y a su destino, no dude en consultar con su corredor de seguros.
¿En qué consiste el período de gracia de los seguros?
Hemos cambiado de cuenta corriente, puntualmente no tenemos saldo disponible, estamos con mil cosas en la cabeza y se nos pasa… puede haber muchos motivos diferentes por los que la aseguradora no pueda cobrar nuestra prima, pero la ley ya ha pensado en cómo proteger al asegurado en estas situaciones.
En el artículo 15 de la Ley del Contrato del Seguro se expone que la póliza queda suspendida un mes después del vencimiento de la prima. Es lo que se llama “período de gracia” y significa que, aunque no hayamos realizado el pago, la garantía del seguro sigue vigente durante un mes adicional.
Esto no significa que nos regalen un mes de seguro gratuito: el “período de gracia” está pensado para dar solución a un posible error o complicación en el pago, por lo que el nuevo contrato comenzará el día en el que venció el anterior, no cuando la aseguradora ingrese el recibo.
En el caso en el que el pago no se realice en un mes después del vencimiento de la prima, se suspenderá la póliza y dejaremos de estar cubiertos. Sin embargo, el contrato no estará totalmente extinguido. Hasta seis meses después del vencimiento de la prima, el tomador del seguro puede volver a activar la cobertura en 24 horas si abona aquella, teniendo que pagar solo el período en curso.
Si transcurridos esos seis meses no se ha efectuado el pago, habitualmente, la aseguradora da por extinguido el contrato, sin embargo, el artículo 15.1 de la Ley de Contrato de Seguros le permite reclamar la liquidación de la prima en vía ejecutiva. Por otro lado, según una sentencia del Tribunal Supremo,
para que la aseguradora quede libre de la cobertura por responsabilidad civil debe acreditar “haber dirigido al tomador del seguro un correo certificado con acuse de recibo o por cualquier otro medio admitido en derecho que permita tener constancia de su recepción, por el que se notifique la resolución del contrato”.
Lo más recomendable es no esperar al último momento y preparar con antelación el pago de la prima o, por el contrario, avisar en tiempo y forma si no vamos a renovar el contrato. Además, todo será mucho más sencillo gracias a la ayuda de su corredor de seguros, quien seguirá de cerca cualquier incidencia relacionada con su seguro para que esté siempre correctamente protegido.
Estos son los seguros que no puede dejar de tener un autónomo
Crecen más de un 25 % los ciberataques en el año 2017
A la espera de datos algo más ‘definitivos’, se estima que 2017 acabará con 1.200 incidentes categorizados como de peligrosidad muy alta o crítica. En el cómputo global, el número de ciberincidentes gestionados el año pasado habrá crecido un 26,55% frente a 2016. Son datos del Centro Criptológico Nacional.
La elocuencia de las cifras de ciberataques se muestra en que en el año 2010 el número de incidentes resueltos fue de 80, para pasar a 3.998 en el año 2012 y más 27.000 en 2017.
El ciberespacio se ha convertido en algo muy complejo y “el problema es que somos felices en ese entorno”. Y en una clasificación de las principales amenazas, la más preocupante es el ciberespionaje empresarial “porque destruye el tejido productivo”, la base para el crecimiento de la economía. Lo ha advertido Luis F. Hernández, jefe de la Unidad de Ciberseguridad de la Guardial Civil, en el primer Hackaton Legal celebrado en España, organizado por la Universidad Francisco de Vitoria (UFV) y que ha dirigido Beatriz Vila, coordinadora de Excellens y Derecho.
En ese ranking de potenciales amenazas por detrás del ciberespionaje se sitúa el ciberdelito, por el ingente daño económico que ya está causando. El tercero es el hacktivismo, los ataques a webs y el robo y publicación de datos; y el cuarto el ciberterrorismo.
¿Se aseguran los autónomos menos de lo que les convendría?
Los autónomos tienen un nivel de aseguramiento inferior al que corresponde a su desprotección y los riesgos que soportan. Los seguros con mayor índice de penetración en este colectivo son los seguros de Vida y planes de pensiones.
El colectivo de autónomos es uno de los más desprotegidos, y de los que más patrimonio personal ponen en riesgo a la hora de realizar su actividad, dado su carácter emprendedor. Es, por tanto, uno de los colectivos que más necesidad tienen de asegurarse para protegerse. Sin embargo, esto choca con la escasa cultura de aseguramiento que todavía arrastra el tejido productivo de nuestro país. Según el estudio ‘ADN del emprendedor’, el 17 % de las pymes españolas solo contrata la cobertura básica o la que exige la ley en las distintas modalidades de seguro, al infravalorar el riesgo y la necesidad de asegurarse.
Cabe destacar que uno de cada cinco trabajadores españoles es autónomo, por lo que este colectivo representa el 17 % de la población ocupada, según el Instituto Nacional de Estadística (INE). De los 3,3 millones de empresas registradas en España, el 84 %, es decir, 1,8 millones, están encabezadas por un autónomo. Y de ellos, un millón son empleadores.
Según ha explicado José Manuel Inchausti, CEO de Mapfre en Iberia, durante su intervención en una reciente jornada técnica sobre los riesgos que afectan a los trabajadores autónomos organizada por Fundación Mapfre y Cepyme, las necesidades de aseguramiento de este colectivo abarcan todos los campos del seguro (patrimoniales, RC, previsión para el futuro, personas, familiares…), lo que empuja a las compañías a ofrecer a estos trabajadores soluciones con un enfoque integral.
De acuerdo con el último Informe Estamos Seguros de Unespa, los seguros de Vida y planes de pensiones tienen mayor penetración entre los autónomos, con un 40,6 %, que entre los empleados por cuenta ajena, con un 39,7 %; los jubilados, con un 11,6 %, y los parados y otros, con un 15,1 %, según datos de la Encuesta Financiera de las Familias.
En lo que se refiere a la distribución por productos, “si se sigue tomando el PPA como termómetro de la previsión de la jubilación, se ve que éste alcanza las cotas más elevadas entre empresarios y profesionales liberales. Aunque se podría pensar que entre autónomos y comerciantes podría registrar niveles parecidos, en realidad no es así”, revela el informe. “Los autónomos son básicamente proclives a adquirir productos que les protegen frente a riesgos como la muerte, la invalidez, etcétera”, señala. Así, en la distribución de los compradores del seguro de Vida por productos y profesiones, obtenemos que la categoría de autónomos y comerciantes presenta un 74,8 % en cobertura por fallecimiento, un 4,9 % en PPA, un 4,2 % en ahorro en capital, un 4,2 % en ahorro en renta, un 7 % en PIAS y un 4,9 % en SIALP.